articulo1En este artículo quiero escribir acerca de un tema muy interesante,  que  es  de  mucha  importancia  para  todos  y  que  es  muy  frecuente  en  nuestro  medio.  Se  trata  del  cáncer  de  colon.  Mencionaremos  algunos  aspectos de la enfermedad, pero como el nombre del artículo lo dice, nos  enfocaremos  un  poco  más  en  la  necesidad  de  hacer  una  detección temprana de dicha enfermedad.

Como  es  el  caso  de  la  mayoría  de  enfermedades  cancerosas  malignas,  el  cáncer  de  colon suele  encontrarse  muy tarde,  es  decir,  en  etapas muy avanzadas y poco o nada se puede hacer en estos casos.  Los síntomas pueden ser muy variados, pero los más frecuentes e importantes

son: anemia inexplicable, pérdida de peso, sangrado en las defecaciones,  adelgazamiento  en  el  calibre  de  las  heces,  acompañado  de  dolor abdominal  y  en  ocasiones,  una  masa  palpable  en  el  abdomen.  Obviamente,  en  caso  que  una  persona tenga  estos síntomas,  estaremos frente  a  un  caso avanzado  de  cáncer  de  colon o al menos, un  caso bien  definido y establecido de éste.

Hay  ciertos  factores  que  se  han  relacionado  fuertemente  con  el desarrollo del cáncer de colon, tales como: la ingesta abundante de carnes rojas,  la  baja  ingesta  de  fibra  en  la  dieta,  la  presencia  de  pólipos  en  el colon  (crecimientos  anormales  de  la  mucosa  del  intestino),  y  algo  muy importante, antecedentes familiares de cáncer de colon, entre otros.

La mayoría de asociaciones médicas norteamericanas encargadas de ver los padecimientos digestivos (donde se incluye el colon), mediante un  consenso han establecido las recomendaciones para lograr una detección temprana  del  cáncer  de  colon.  Entre  ellas  podemos  mencionar  las siguientes:  A  partir  de  los  50  años  realizar  estudios  de  screening (búsqueda) aunque no tenga ningún síntoma, ya que a esa edad es cuando se comienzan a ver los casos de cáncer de colon. O bien, hacer los estudios  antes de los 50 años cuando aparecen síntomas tales como el sangrado en las  defecaciones.

Lo mismo  debe  hacerse  en  las  personas  con familiares  con cáncer de colon o recto.

El  mejor  de  los  estudios recomendados  para  hacer  una  detección temprana  de  la  enfermedad  es  la  Colonoscopia:  se  trata  de  unprocedimiento  mediante  el  cual  se  introduce  una  cámara  de  alta resolución a través del ano para ver directamente el colon por dentro. En este estudio podemos observar la presencia de un tumor, hay acceso para tomar una muestra para biopsia (de ser necesario) o podemos identificar un  pólipo,  ya  que  existe  una  relación  pólipo‐cáncer  bien  definida.  El  estudio se hace bajo sedación, por lo tanto, no es doloroso y su éxito es  dependiente de la experiencia del especialista, ya que puede presentarse  ciertas  complicaciones  si  no  se  toma  las  precauciones  del  caso.  La desventaja es que es un estudio caro.

La  otra  forma  de  estudios  recomendada  es  mediante  una proctosigmoidoscopia  rígida  o  flexible  junto  con  un  examen  buscando sangre oculta en heces.

La  proctosigmoidoscopia  examina  los  últimos  30  cm.  del  colon (lugar donde se desarrolla el 80 a 85% de los casos) y la sangre oculta en  heces examina el resto del colon, es decir, el 15 a 20 % restante (de una forma indirecta). La ventaja es que es un estudio mucho más barato que una  colonoscopia,  no  se  necesita  de  sedación  o  algún  otro  tipo  de anestesia y se hace en la oficina del Coloproctologo. Si alguno de estos 2  estudios  resultare  positivo,  se  recomienda  hacer  la  colonoscopia completa.

Como  especialista, recomiendo seguir  estos  consejos  (aunque  ud,  amigo  lector,  no  tenga  ningún  síntoma)  ya  que  con  esto  podremos  detectar a tiempo una enfermedad que puede ser mortal.

La  gran  mayoría  de  personas  no  consultan  a  tiempo  con  el coloproctologo  por:  vergüenza,  automedicación  (pensando  que  el sangrado  puede  deberse  a  otra  enfermedad  como  hemorroides)  o  por ignorancia.

Recomiendo que busque a su Coloproctólogo para una evaluación.

Autor: Dr. Samuel Antonio Alfaro Castro